abril 24, 2017

Redes sociales y literatura ¿Puente o muro?

El sábado pasado estuve en la Feria Internacional del Libro de Santo Domingo hablando sobre redes sociales y literatura, junto con el escritor y curador de arte Luis Graham Castillo.

La dinámica fue genial, aunque algo amenazada en principio por la falta de apoyo tecnológico. Al parecer los pabellones carecen de una laptop para hacer proyecciones. Ya otras personas invitadas como expositores a la FILSD 2017 han pasado por el mismo problema. Y es increíble que ese pase. Le diré que exigí que me facilitaran la laptop, porque sin ella no podría presentar a mis invitados internacionales, a quienes entrevisté semanas antes y cuyas entrevistas pasé horas editando.

Gracias a Thor y Yemanyá que las chicas que llevan la logística del pabellón no solo fueron diligentes, sino comprensivas. Gracias a ellas la dificultad fue sorteada.

En resumen hablé un poco de los origines de las redes sociales, que en esencia existen desde que el internet para uso público y masivo existe. Luis y yo hablamos de algunas experiencias en Geocities, Hotmail, Messenger, Hi5 hasta las actuales redes de Facebook, Twitter e Instagram (que son las que más se usan).

Hicimos algunos apuntes sobre su uso como herramienta para la literatura, aunque discrepamos en la idea de que las herramientas no crean nuevos géneros literarios. Ahí hablamos de la "blogonovela" de Hernán Casciari, de los famosos "poetuits", y de la novela por entregas del dominicano Miguel Piccini, que integró un blog y varias redes sociales

Luego de algunos comentarios más presenté a los internacionales: Memes Literarios y Alejandra Arévalo.

Los dos administradores que entrevisté de Memes Literarios (Charli y Mifune) explicaron algunos aspectos de la página en Facebook que hoy supera el millón de seguidores, lo interesante y fuera de lo común que ha sido traer a la gente a la literatura a través de los famosos memes (curioso el porqué los memes se llaman memes). No pude pasar todo el vídeo porque el tiempo apremiaba.

La segunda invitada, Alejandra, es una booktuber (termino también que tiene un pleito conmigo como el de blogger y tuitero...un sin sentido porque las redes no dan profesión, pero esto no viene al caso), pero antes de booktuber es licenciada en Letras Mexicanas, gestora cultural y fue profesora. Su entrevista no solo encantó, sino que entre el pública había seguidores de ella en Youtube.

Aquí les comparto los vídeos de ambas entrevistas. La edición fue mía, así que no es algo muy profesional que digamos, pero fue lo mejor que pude hacer con Movie Maker.

Sobre el tema, pues las redes en conclusión son lo que han sido siempre: puentes. Aunque algunos confundan el medio con el contenido (si, ya se que hay una teoría marxista o algo así de que el medio es el mensaje, pero no estoy del todo de acuerdo con ella. Creo más bien que el medio da forma el mensaje, no es el mensaje).

Memes Literarios



Sputnik (Alejandra Arévalo)


abril 17, 2017

Los escritores "bisoños"

Foto Cliff Johnson/Unsplash

Hoy en las redes algunos escritores han reaccionado en las redes sociales a las afirmaciones del ministro de Cultura, Pedro Vergés, quien en una entrevista publicada en Diario Libre (y de la cuál participé como entrevistadora) señaló a los "escritores bisoños" (o sea, jóvenes...aunque el diccionario lo aplica a inexperto y nuevo, no a alguien joven) como los "distorsionadores del mercado editorial".

De la entrevista rescato de mi transcripción la siguiente declaración de Vergés.

"La literatura dominicana como es una que no está sometida a la industria, porque la industria editorial no existe entre nosotros se compone fundamentalmente de ediciones de autor. Las ediciones de autor, cada quien es libre de cuando le dé la gana publicar un libro, pero las ediciones de autor tienden a confundir el mercado del libro. Porque junto a una gran obra que se publican, se publican muchísimas obras de escritores bisoños que no debieron haber publicado esas obras, porque en la literatura hay un tiempo. Y que si existiera una industria editorial, esos autores probablemente no llegarían al público porque la industria editorial se encarga de filtrarlos, hasta que tengan la calidad de vida, como pasa en cualquier sitio donde hay un mercado editorial".
Estos juicios han dejado a muchos no solo sorprendidos, sino con una certeza de que Vergés tiene una visión limitada y acartonada de la literatura producida en República Dominicana.

En medio de las discusiones, me dedique durante el día de hoy a buscar las edades en que publicaron por primera vez algunos de los escritores dominicanos considerados parte del "canon literario", o como quieran llamarle. Salvando contextos de época (no es lo mismo un adolescente en el siglo XIX que ha principios del siglo XX), he quedado sorprendida con algunos datos que revelan que tan poco adecuado y consistente en cuanto la producción y calidad literaria es el criterio de Vergés.

Aquí le comparto la lista con algunas anotaciones, que solo ocupa a escritores nacidos en el siglo XIX y principios del XX. Prometo extender la lista en los próximos días

  1. Salomé Ureña. Primera publicación “Poesías de Salomé Ureña de Henríquez” 1880. Tenía 30 años. Nació en 1850.
  2. Arturo B. Pellerano Castro. Primera publicación “La última cruzada”. 1888. Tenía 23 años. Nació en 1865.
  3. Fabio Fiallo. Primera publicación “Primavera sentimental” 1902. Tenía 36 años. Nació en 1866.
  4. Vigil Díaz. Primera publicación “Góndolas” 1912. Tenía 32 años. Nació en 1880.
  5. Federico Bermúdez.  Primera publicación “Oro Virgen” 1910. Tenía 26 años. Nació en 1884. Tenía 32 años cuando publicó su famoso poema “Los humildes” en un libro de igual nombre. Murió en 1821 con 36 años. 
  6. Altagracia Saviñon. Su obra se perdió y se dice como un rumor que Osvaldo Bazil robó algunos de sus poemas luego de que fuera ingresada en el siquiatrico Padre Billini. Se dice que estuvo enamorada de Bazil y que empezaban un noviazgo cuando ella fue recluida por lo que se ha reseñado era un diagnóstico de esquizofrenia paranoide. Su famoso poema “Mi vaso verde”, considerado como un poema inaugural del modernismo literario en República Dominicana, fue publicado en 1903 en la revista “La cuna de América”. Tenía 17 años cuando fue publicado. Nació en 1886. 
  7. Osvaldo Bazil. Primera publicación “Rosales en flor” 1901. Tenía 17 años. Nació en 1884. Su segundo libro “Arcos votivos” fue publicado en 1907, cuando tenía 23 años. Con 28 años publicó “Parnaso dominicano” (1912) y al año siguiente, con 29 años. “Parnaso antillano”. 
  8. Apolinar Perdomo. Sus poemas fueron reunidos en  “Cantos de Apolo”, en 1923. Sus poemas fueron publicados en periódicos y revistas antes de su muerte, en 1918. Al momento de fallecer tenía 29 años. “Sonámbulo”, monólogo publicado en la revista cuna de América el 6 de octubre de 1907, cuando tenía 18 años. 
  9. Ricardo Pérez Alfonseca. Considerado por Rubén Dario el “"Benjamín" de la poesía hispanoamericana”, aunque se reseña que sobresalió como ensayista.  Primera obra “Mármoles y lirios” 1909. Tenía 17 años.
  10. Domingo Moreno Jimenes. Primera publicación “Promesa” 1916. Tenía 22 años. Ese mismo año publicó “Vuelos y duelos”. Parte del movimiento Postumismo. 
  11. Carmen Natalia Martínez Bonilla. Primera obra “Alma adentro”. Tenía 22 años. Nació en 1917.
  12. Tomas Hernández Franco. Primera publicación “Rezo Bohemios” 1921. Tenía 17 años. Nació en 1904.
  13. Manuel del Cabral. Primera publicación “12 poemas negros” 1935. Tenía 23 años. Nació en 1912.
  14. Héctor Inchaustegui Cabral. Primera publicación “Poemas de una sola angustia” 1939. Tenía 27 años. Nació en 1912.
  15. Pedro Mir. Su famoso poema “Hay un país en el mundo” fue publicado en 1949. Tenía 36 años. Nació en 1913.
  16. Aída Cartagena Portalatín. No sé si es su primer libro, pero “Vísperas para un sueño” fue publicado en 1944. Tenía 26 años. Nació en 1918
  17. Hilma Contreras. Narradora. Sus primeros cuentos publicados fueron “Tarde de cristal” y “Los buenos se van” en 1937. Tenía 24 años. Nació en 1913.


abril 12, 2017

Once años de El diario de la rosa

Pasé el once aniversario de este blog de largo. Y es bueno, en parte.

Es bueno porque significa que estoy bien ocupada en hacer otras cosas, y en producir contenido de los temas que amo, que en celebrar el cumpleaños de una herramienta.

Pero hay otra parte que no es buena ni mala, sino sentimental. Este blog, El diario de la rosa, muestra esa maduración como escritora y periodista, además de guardar mucho de lo que he querido construir desde ambos ambiciones profesionales.

Lo alegre para mí es que no solo superé la época "del fenómeno blogger", sino que este espacio, que este medio, se ha convertido en una ventana para un crecimiento hacia dentro y hacia fuera.

El año pasado, en el décimo aniversario, pretendí preparar algo que al final se diluyó. Pero este año, y a pesar de que el "aniversario" fue hace once días, quiero compartir algunas de las entradas que han tenido un significado en este "trabajar en mi blog", van desde la muy significativas para mí, como aquellas que exponen asuntos que me parecen de interés, además de ser texto que me enorgullecen.

Agradezco a los que me leen por aquí, a los que han comentado, a pesar de que ahora las redes se hagan desde otras herramientas, pero este hogar llamado El diario de la rosa fue mi primera ventana y mi primera red, y me ha dado no solo espacio para crecer, sino para conocer y desaprender.

El tiempo es una convención, dicen algunos, pero pasa y nos marca. Se darán cuenta cuando lean estas entradas.