Llegó al librero. Sentado, extiende la mano y alcanza una pila los libros del tramo más bajo.
Levanta el primero. Lo examina. Se lo lleva a la boca por un instante. Lo vuelve a mirar. Lo lanza al piso. Toma otro. Lo examina. Lo abanica. Murmura su propio lenguaje. Lo lanza al piso.
Sigue con los otros, hasta que se detiene, voltea el rostro y sonríe.
La curiosidad hace caminos.
comiéndose los libros desde chiquitico... a quien habrá salido? jejeje
ResponderEliminarSonrisas como esa solo son provocadas por el amor, o por la buena lectura; y a veces, por ambas juntas. Saludos.
ResponderEliminarParece que va a ser un devorador de libros. Literalmente.
ResponderEliminarHojear el Libro abierto.
Que te digo Maria Estilia....jejejejej Espero que le guste leer. Crecerá en un ambiente en que libros habrá.
ResponderEliminarDarío: espero que aprende a amar la lectura, por ahora la travesura le valió la sonrisa.
Víctor: jajjajjaja Ya sabes. Por ahí anda un libro con las marcas de sus dientes.
¡Lindooooooo! Snif...
ResponderEliminarInvitación - E
ResponderEliminarSoy brasileño.
Pasei acá leendo , y visitando su blog.
También tengo un, sólo que mucho más simple.
Estoy invitando a visitarme, y si es posible seguir juntos por ellos y con ellos. Siempre me gustó escribir, exponer y compartir mis ideas con las personas, independientemente de su clase Social, Creed Religiosa, Orientación Sexual, o la Etnicidad.
A mí, lo que es nuestro interés el intercambio de ideas, y, pensamientos.
Estoy ahí en mi Simpleton espacio, esperando.
Y yo ya estoy siguiendo tu blog.
Fortaleza, la Paz, Amistad y felicidad
para ti, un abrazo desde Brasil.
www.josemariacosta.com