agosto 25, 2006

Destino

Llega cuando no lo esperamos, nos asalta. Cambiamos, sin darnos cuenta. Miramos el escenario y sonreímos, a veces, y lloramos, otras. Buscamos más allá del horizonte…respiramos. Mucho que ver, mucho que caminar, mucho que hacer.

Entonces, nos toca decidir. Decidir que dejamos atrás, que puertas cerrar, que ventanas abrir. Vemos el equipaje para darnos cuenta si debemos aligerarlo para volar, o cargarlo para tocar con más firmeza el suelo que besamos con esperanza.

Y nos despedimos…para encontramos.